Estaba pensando en escribir solo una breve declaración ya que este perfume es de alguna manera muy difícil de expresar con palabras, pero ese espacio no fue suficiente. Dado que esta fragancia no evoca imágenes, paisajes o recuerdos en mi mente, reviso las notas y me concentro en cómo se desarrollan. La apertura es especiada y el jengibre es muy realista y natural, pero por otro lado, la base está fuertemente presente desde el principio. En mi piel, las notas florales nunca emergen de la profunda y oscura base, mientras que el jengibre logra mantener su aroma durante 2 horas. Para mi nariz, el ámbar gris es primero dominante con una sensación ahumada del incienso, así que ahumado no significa tabaco como el ahumado o el humo del fuego. El ámbar gris es primero más fuerte y opulento y después se vuelve más ligero y salado, pero no es animal. El pachulí aporta un toque oscuro, terroso y amaderado a la mezcla, pero no huele a ese pachulí familiar como, por ejemplo, en Patchouli-Oud | Affinessence, Portrait of a Lady | Frederic Malle o Straight to Heaven, White Cristal | Kilian, está todo el tiempo envuelto en ámbar gris y labdanum, que tampoco aporta ese olor a cuero habitual, sino un poco de matices resinosos de ámbar. Con el tiempo, el almizcle comienza a dejar otras notas de base en el fondo y toda la mezcla se vuelve sensualmente suave y la sensación masculina que era dominante al principio cambia a completamente unisex. Entiendo totalmente por qué esta fragancia es más usada entre hombres (no entiendo por qué Mariya | Omanluxury no es popular entre las mujeres). No hay nada femenino en ella y, aunque no divido las fragancias por género, y yo misma uso todo tipo de perfumes, ayuda a entender cómo es la fragancia. La longevidad en mi piel es mucho menor que otras de Omanluxury y la proyección es moderada (muchas de ellas proyectan como bestias). Gracias por leer y espero que te haya gustado mi reseña. Apreciaría si me sigues en IG: @ninamariah_perfumes Me da mucha motivación para escribir más. 🤗