Este aroma es elegante y salvaje al mismo tiempo. Me recuerda a un licor de cerezas, rebosante de jugosidad. A medida que se asienta, se convierte en una cautivadora mezcla de sándalo, ámbar y toques florales, creando un aroma oscuro pero limpio que es bastante intrigante. Personalmente, soy de los pocos que perciben un oud prominente en esta fragancia. Empieza fuerte, pero al final se suaviza hasta convertirse en un sutil aroma para la piel. Esta fragancia realmente me transporta a un bosque místico. Aunque es versátil y apta para todo el mundo, no puedo evitar imaginarme a un hombre llevándola.