Entiendo por qué Ombre Nomade es la fragancia más famosa de Louis Vuitton: cumple todos los requisitos. Es un aroma de rosa con mucha clase y muy caro, hecho para atraer a las masas sin dejar de ser lo suficientemente complejo como para cautivar a la gente. En mi piel, el aroma es muy fuerte, con la rosa más prominente que cualquier otra cosa. La rosa huele un poco sintética, pero no es algo especialmente malo, ya que combina bien con el resto de las notas. Un oud ahumado de fondo aporta profundidad y oscuridad, mientras que un toque de frambuesa añade una dulzura adictiva. Esta fragancia es agradable de llevar y definitivamente hace honor a las afirmaciones del modo bestia, es una de esas fragancias que puedes oler desde un par de metros de distancia con sólo quitar el tapón. Aunque me encanta esta fragancia, puedo imaginarme fácilmente que si la llevara con regularidad se volvería muy cansina y odiosa, es para esas ocasiones en las que realmente apetece esa poderosa explosión de oud y rosa.